La Ley de la Segunda Oportunidad en Murcia: Un Respiro Financiero
No todas las deudas son exonerables bajo la Ley de la Segunda Oportunidad. Aquí te presentamos una guía sobre qué tipos de deudas no pueden cancelarse:
Estas deudas están relacionadas con compensaciones económicas por daños causados a terceros.
Desafortunadamente, la Ley de la Segunda Oportunidad no permite la cancelación de este tipo de deudas.
Así como las derivadas de accidentes de trabajo y enfermedad profesional, cualquiera que sea la fecha en que se declaren.
Generalmente no pueden cancelarse mediante la Ley de Segunda Oportunidad.
Estas deudas están vinculadas al sustento y bienestar de hijos o cónyuges y están protegidas por la ley para garantizar el cumplimiento de las responsabilidades familiares.
Las deudas correspondientes a salarios por los últimos 60 días de trabajo antes de la declaración de concurso no son cancelables.
Esta disposición resalta la prioridad de asegurar el pago de salarios pendientes a los empleados en situaciones de insolvencia.
Cuya gestión recae en la Agencia Tributaria, pueden exonerarse hasta un máximo de 10.000 euros.
En este proceso, los primeros 5.000 euros serán exonerados en su totalidad, y el restante 50% de la deuda pendiente hasta el límite de 10.000 euros.
Este mismo principio se aplica a las deudas contraídas con la Seguridad Social.
Es importante destacar que esta exoneración es válida únicamente en el primer procedimiento; si se solicita nuevamente después de un período, ya no serán exonerables deudas de Derecho Público.
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Esto significa que, aunque la ley permite la exoneración de ciertas deudas, los costos legales incurridos durante el proceso, conocidos como "costas judiciales", generalmente no son cancelables. El deudor deberá asumir estos costos, incluso si logra la exoneración de las deudas principales.
Si usted tiene su vivienda habitual con hipoteca, hay que mencionar dos casos especiales antes de elegir si se realiza un plan de pagos o una liquidación del pasivo insatisfecho.
Si posee una casa cuyo valor actual es igual o menor al saldo pendiente de la hipoteca, la opción más adecuada para liberarse de las deudas sería optar por un plan de pagos.
Por otro lado, si el valor actual de la vivienda es inferior al saldo pendiente de la hipoteca, el deudor puede recurrir a la opción del concurso sin masa. En esta situación, se entiende que la vivienda no aportaría beneficios a los acreedores si se vendiera, por lo que el deudor puede liberarse de todas las deudas, excepto la hipoteca, que deberá continuar pagando hasta que finalice el préstamo hipotecario.
Es cierto que Ley de Segunda Oportunidad brinda una vía para liberarse de muchas deudas pero esto no garantiza la cancelación total en todos los casos.
La asesoría legal especializada es esencial para entender cómo se aplicará la ley a su situación financiera específica, por lo que no dude en contactarnos.
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